
Cuando Gabriel Sadi, Director de la carrera de Relaciones Públicas, me invitó a mi y a mis alumnos vía e-mail, leí los títulos de los trabajos y me asombré (o no tanto…). Cada día más tenemos profesionales del periodismo abordando áreas de relaciones con los públicos desde las organizaciones (Relaciones Públicas).
Empezó a exponer Valeria Vera, redactora del diario La Nación en su versión on-line. Teniendo tantas cosas para observar dentro del diario, la joven profesional decidió estudiar la comunicación interna. Más precisamente, realizó un diagnóstico del estado de la comunicación interna en la compañía, asesorada por, nada más ni nada menos que Miguel Ritter. Es curioso que una profesional del periodismo, que trabaja en un medio, decida observar esto.
Los primeros periodistas que se introdujeron en el mundo de la comunicación institucional (hace mucho tiempo, Ivy Lee para ir más lejos) lo hicieron de la mano de la calidad de su redacción, del conocimiento de la producción de noticias y de su agenda de contactos en los medios de comunicación (colegas conocidos). Así, varios periodistas fueron migrando de los medios a las áreas de comunicación de las empresas y, sobre todo, las áreas de los organismos públicos. Carecían sí de herramientas de relaciones con otro tipo de públicos, como las autoridades, las comunidades o los empleados. Igualmente, como vemos, se están dedicando a estudiarlas. ¿Qué está sucediendo? Las disciplinas o ciencias de la comunicación están convergiendo.
Marketing avanza: marketing relacional, social, deportivo, corporativo, político. Periodismo avanza (Periodistas Institucionales). Publicidad avanza: es igual a comunicar. Todos empezamos a hacer de todo… agencias de publicidad hacen “prensa” y manejan “imagen”, consultoras de Relaciones Públicas hacen Marketing, gente de Marketing hace Responsabilidad Social… ¡falta que los diseñadores hagan relaciones financieras!
¿Por qué pasa esto? No es sencillo responder. Pero probablemente suceda por la redefinición casi constante del rol de las profesiones en un mundo de cambios sucesivos, impactado por las tecnologías nuevas como el fenómeno de la Web 2.0.
¿Es malo esto? Indudablemente no. Primero que nada creo que genera una sana competencia profesional, que puede llegar a impulsar un esfuerzo mayor por parte de las disciplinas involucradas. Segundo, es un paso adelante para el trabajo multidisciplinario. Cosas que son impensadas para el mundo de los abogados por ejemplo, que no ven a profesionales de otras carreras realizar funciones de la suya, si suceden en nuestros ámbitos. Esto, que parece una desventaja, creo es una ventaja, ya que permite armar equipos con personas de miradas diferentes para abordar los problemas organizacionales. Por ejemplo, en este momento en Open Group estamos haciendo una búsqueda y entrevistando, ente otros, a Antropólogos…
Volvamos a la web 2.0, un fenómeno que si no produjo varios de los cambios del escenario actual, seguramente los producirá. El segundo expositor, German Ángeli, abordó el fenómeno de la web 2.0 analizando su aplicación en la campaña política 2007 de los tres principales candidatos a Jefe de Gobierno Porteño o, como diría Dillenberger, Alcalde (a mi también me gusta como suena). Muy interesante el análisis de Ángeli quién calificó a dicha campaña como la primera en la cual se observaron desarrollos de campañas integrales en Internet. Analizó el sitio de Filmus, el de Macri que es Mauricio y el blog de Telerman quien fue posiblemente el más audaz en la utilización de la web. La tesis en su mayoría abordó la comunicación política. Recién sobre el final planteó la pregunta: ¿y el rol del periodista en todo esto? Buena pregunta.
Finalmente la exposición de Guillermo Sayas, misionero que no resistió la tentación de analizar la comunicación del gobierno de su provincia (¡en cualquier momento le tocará a la Salta y a la gestión de Juan Manuel Urtubey en mi blog!). Rescato esta tesis sobre todo por los dos grandes debates que parecen encauzarla o que se manifestaron en la exposición. El primero gira en torno al concepto de “brecha digital” y la dicotomía de si las nuevas tecnologías incrementan las desigualdades o democratizan la sociedad. El misionero describió con números contundentes otra realidad más allá de la General Paz: en Misiones 7 de cada 100 personas posee computadora y de 100 que poseen computadora solo 5 se encuentran conectados a Internet. Este panorama es similar en otras provincias y pueblos de nuestro norte, donde si no se habla de web, menos de web 2.0.
Comunicación de Gobierno
El segundo debate se encuentra en el fondo de los postulados de esta tesis y es la discusión acerca de la delgada línea que separa la comunicación gubernamental y la comunicación electoral. El tema se manifestó en un apasionado análisis del modo de comunicar que utilizó Rovira durante su gobierno, antes de ser derrotado por el obispo Piña, hecho que fue un piñón para varios gobernadores con aspiraciones a reelección. El tema tiene la difícil tarea de delimitar cuándo la comunicación gubernamental pasa a ser electoral…
¿Transmitir la ideología e ideas del gobierno de turno en un acto de gestión es comunicación electoral? ¿Utilizar bombos y banderas en la asignación de miles de viviendas es electoral? Utilizar los mismos colores institucionales de la identidad visual del gobierno para identidad visual de la campaña ¿qué es? Parece fácil responder… pero en la práctica no lo es. La comunicación de gobierno, por más seria e institucional que sea, forma en la mente del público la imagen de quien detenta el poder, que luego será candidato… es decir que invierte en imagen con fondos públicos… la frontera es difusa y, para cerrar con rima, hay gente que se abusa (campañas financiadas por todos nosotros).
¡Felicitaciones a Valeria, Germán y Guillermo por sus trabajos! ¡Bienvenidos al otro lado del mostrador!
1 comentario:
QUE NIVEL!
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